se siente como si vos estuvieras
en el caribe y yo en el frio
continente antartico;
hablando idiomas completamente distintos
ignorando algun rasgo en comun.

parece que no existieron aquellos
recuerdos en donde hablabamos
en el mismo dialecto, el mismo tiempo.

mi alma en dos y tus ojos
que deciden no escucharla.
mis sueños que no dejan
de llamarte.

tan largos los metros que
se interponen entre ambos.
unos pasos que sienten el peso
de saber que no corresponden,
y un animo sin aquella
guerra de rizas que te producia.

como hablarte,
si se que dejaste de mirarme
con esa intencion de alegrarme.

o

como no querer llorar,
si cada vez que te avergonzas
mi cabeza vuelve a torturarme
recordando aquel dia en donde
todo parecia tan perfecto.

simplemente unos metros,
que dibujan el largo camino
que no tiene fin,
el que me insita a volver,
el que mi alma me obliga a seguir.

mi yo,
grita no mas.
dice que ya todo lo perdi
y que no voy a volver a ver
tus ojos llorando alegres por mi.

es el el que me tira
para no seguir,
pero ya cegaste mi alma
y decide no hacerle caso.

es ella la que te
anda necesitando
la que anda llorando por los rincones
porque sabe que no hablamos en el
mismo idioma.

pero sigue intentando,
sabiendo que nunca
vamos a volver a comunicarnos
sin palabras, con gestos
de nuestras almas
desde lo profundo de nuestros
ojos oscuros.