descargue, por fin.

veo a mis espaldas para ver si viene alguien. están todos dormidos, pero pienso que hay alguien espiándome. alguien viene.. o es la necesidad de que alguien venga y toque mi hombro. bajo el pantalón, me esta ardiendo...

.. hace un par de horas, bajo el agua. me senté. empecé a gritar, como tantas veces, como tantas veces lo hice, en silencio, mordiéndome los dedos. cerré el agua. quede sentado, desnudo. me pare, quede tan quieto recordando gritos que perturban mi paz. me quede quieto, viendo como el agua congelaba mis huesos: no me había acordado, la puerta estaba abierta. no camine, no la cerré. me quede en la misma posición. esperando que alguien seque mi cuerpo, como cuando era un niño, que yo solo me quedaba quieto y limpiaban mi cuerpo. unos minutos en el mismo lugar, sin moverme. mire mi pierna y dije: tengo que verlo..

acaricio, examino. disfruto, aprieto

.. de frente al espejo, unos simple segundos, donde sin pensarlo, deseo profundidad. mas profundo, mas largo que lo normal. veo en el espejo, mis ojos empiezan a brillar. como si en ese brillo, escapara algo de mi cuerpo, de mi alma.
ahí estoy, ahí estoy yo. vuelvo a la ducha, hago correr el agua. esta vez solo agua caliente. bajo ella mi pierna, por simples movimientos de reflejo, se corre un paso atras. unos intentos mas, y me quedo quieto ahí. inmóvil. viendo como el agua golpea en la pierna, sintiendo la misma sensación de las brujas quemadas en la hoguera, o de los vampiros bajo el brillo del sol. el mismo grito de siempre, en silencio, hacia dentro. muerdo con mas fuerzas mis dedos, ellos también empiezan a sangrar. cierro el agua, me quedo como al principio, sin hacer movimiento alguno; supongo que esperando lo mismo de siempre.. tan solo como cuando era niño..
deseo salir del baño, abrir la puerta y salir por fin de allí. salir, desnudo, sentirme libre por primera vez. gritar, mostrarme. decir que mi cuerpo es lindo, por primera vez..

escucho puertas abrirse, los pasos vienen a mi. levanto mi pantalón rápido, y veo de donde vienen los gritos. me llaman, me están llamando. vienen del baño.. me preguntan preocupados, con que me corte. yo digo con nada, no me creen; miro al suelo, tampoco me creo. termino diciendo que me corte afeitando, que estaba distraído y me corte sin querer por eso la sangre en el suelo. no me interrogan, no se preocupan. vuelven a dormir. me termino preguntando si se dieron cuenta, si sospecharon de algo. yo seguía con mi barba intacta, pensé que lo habían notado.